Todas tenemos frascos de perfume sin terminar, o que no usamos más de una o dos veces, pero en vez de tirarlos, podemos aprovecharlos con estos usos nuevos y sorprendentes.
Humidificador
Destapa un frasco y colócalo sobre el radiador o calentador ambiental, rociado con un poco de agua, para devolver la humedad al ambiente del hogar y perfurmarlo ligeramente.
Ambientador
Frota los focos con un poco de perfume, y conforme el cristal se caliente, desprenderán el aroma. Sólo debes calcular la cantidad, comienza siempre con unas pocas gotitas, pues tampoco quieres endulzar el aire de tu casa al grado de volverlo empalagoso.
Rocía perfume sobre las flores secas o en pequeños frascos para perfumar y decorar una mesa o mueble de la sala.
Coloca varitas de madera finas en el interior del frasco de perfume abierto, para que se impregnen de la fragancia y aromaticen una habitación durante semanas enteras. Si el frasco es bonito, o pasas el perfume a un frasco llamativo y elegante, será un gran elemento de decoración para tu hogar.
Lámpara de noche
Si el frasco te gusta más que su contenido, conviértelo en una lamparita nocturna para el mueble de la cama. Perfora la parte trasera del frasco para pasar el cable de luz, coloca una tulipa o fanal en la parte superior del frasco y un foquito del color que gustes. Será un elemento decorativo lindo que iluminará ligeramente tu habitación durante la noche.
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