Descubre por qué tu pequeño cambia de humor y lo que esto significa
A nadie sorprenden los cambios de humor tan repentinos que experimentan los pequeños. Pasan en un instante de la risa más alegre al llanto más incontrolable. ¿Qué le pasa?
A una corta edad, la memoria todavía no se ha desarrollado ampliamente, para los niños más jóvenes no existe el tiempo, no hay pasado ni futuro, sólo el presente; este estadio puede prolongarse si no ayudamos a nuestro pequeño a crecer. Si en un momento se están divirtiendo, todo en ellos es risa y placer, pero en cuanto el estímulo pasa, también cambiará su reacción, que puede volverse seria, aburrida, colérica o hasta triste.
Algunas veces, más que un cambio de humor es sólo el agotamiento por una estimulación un poco excesiva. Si notas que aparta la mirada o bosteza, quizá sea momento de dejarlo tranquilo un rato.
Cuando tenga un mal humor repentino, una forma de hacer que se le pase pronto es distrayéndolo con un estímulo de su agrado, como cantarle, mostrarle un juguete de colores vivos o ponerle música rítmica. Pero si le muestras algo que no planeas darle, sólo conseguirás que se sienta frustrado y vuelva a llorar o gritar. A un niño de más de 3 años, también debes distraerlo y dialogar con él.
Con el tiempo, y contigo de guía, irá conociendo sus propias emociones y descubrirá que algunas veces pueden expresarse verbalmente, sin llanto ni gritos. El ejemplo que los padres le den, le ayudará a controlar esas emociones fuertes y a tener un mejor conocimiento de sus propios sentimientos.
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