El hielo hace más que refrescar tu bebida, también es estupendo para tu cuerpo. Lo puedes aprovechar para desinflamar y como producto de belleza, aquí te enseñamos cómo:
Antiinflamatorio
Es un remedio popular, pero hay que recordar que sirve para todo tipo de inflamación corporal. Se trata de un analgésico natural (sólo es agua tan fría que se ha vuelto sólida), que estimula la circulación. Es ideal para esguinces, hinchazón por piquetes (heridas o inyecciones), contracturas, torceduras, golpes y todo lo que se te ocurra.
Coloca el hielo envuelto en un paño delgado sobre la zona afectada, presiona y mantenlo durante unos 20 minutos para que la molestia desaparezca. También alivia los dolores musculares.
Realzar la belleza
El mismo principio de la circulación sanguínea y el efecto antiinflamatorio del hielo se aplica en algunos métodos de belleza. Coloca el hielo sobre zonas de arrugas o bolsas (como debajo de los ojos) para mejorar la apariencia al disminuir la inflamación y alisar la piel.
Si colocas compresas de hielo sobre zonas donde se acumula la grasa, te ayudará a quemar un poco, pues al enfriar el área, el cuerpo gasta las calorías sobrantes para equilibrar la temperatura corporal.
Ahora que lo sabes, no hay pretexto, siempre ten en tu refrigerador moldes y bolsas de hielo, no sólo te quitarán el calor, también te ayudarán en otros aspectos de tu vida.
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